¿Que ocurre si aumenta la contaminación electromagnética de las antenas de telefonía que tenemos justo enfrente?
Hoy vamos a hablar de un tercer estudio publicado el 10 de abril de 2023 en la revista científica Annals of Clinical and Medical Case Reports realizado por el oncólogo e investigador Lennart Hardell de la Environment and Cancer Research Foundation y Mona Nilsson de la Radiation Protection Foundation, quienes realizaron también los dos anteriores, que muestra como unas antenas de telefonía 5G provocaron unos niveles de radiación muy altos en un piso relativamente alejado, y síntomas típicos del síndrome de hipersensibilidad electromagnética.
El estudio se centra en una vivienda con las antenas 5G justo enfrente
El estudio investigó la radiación de una estación base 5G colocada a una distancia de 60 metros de un piso donde vive una mujer de 52 años acompañada de su perro. Las antenas de telefonia se colocaron en el techo de un edificio de 3 pisos y los módulos se dirigen hacia la casa de la mujer, que se encuentra en el segundo piso y que cuenta con balcón. En dicho balcón se midieron los niveles más altos de contaminación electromagnética de las antenas 5G, de más de 2.500.000 μW/m2 (límite del medidor utilizado).
Dentro de la casa, se midieron aproximadamente 758.000 μW/m2 cerca de la ventana que da a la estación base 5G, mientras que en el sofá del salón se midió un máximo de 222.000 μW/m2. Se registraron niveles significativamente más bajos en la cocina y el dormitorio. Ambas habitaciones dan al otro lado de la propiedad donde no había estaciones base 5G o 4G a la vista.
El notable aumento de contaminación electromagnética causa electrosensibilidad
La estación base 5G se instaló el 25 de noviembre de 2022. Anteriormente, había equipos para 3G y 4G en el mismo lugar, pero fue solo después de cambiar a 5G que la mujer en el piso a 60 metros de distancia experimentó problemas de salud severos típicos de la exposición a radiación de microondas elevada. Sin embargo, la mujer solo había permanecido en la casa algo menos de dos meses.
Después del 25 de noviembre, la mujer comenzó a sufrir, entre otros, los siguientes síntomas: dolor de cabeza, mareos, problemas de equilibrio y concentración, náuseas, pérdida de memoria, confusión, fatiga, preocupación/ansiedad, presión en el pecho, tos, hemorragia nasal, problemas de piel, problemas pulmonares, frecuencia cardíaca alta e irregular, dolor en las articulaciones y dificultad para dormir.
Durante un par de semanas durante la Navidad y el Año Nuevo 2022/23, la mujer y el perro vivieron en otra casa con un nivel de contaminación electromagnética significativamente menor y sin antenas 5G a la vista. Casi todos los síntomas desaparecieron, pero volvieron cuando regresó a su anterior vivienda.
El perro también tenía síntomas en forma de diarrea. Después de los paseos, el perro mostró una clara reticencia a volver al piso cargado de radiación.
Anteriores estudios de caso
En enero de 2023 se publicó el primer estudio de caso y en febrero el segundo de Lennart Hardell y Mona Nilsson. A diferencia del nuevo estudio, en los dos primeros casos las antenas de telefonía 5G que se estudiaron estaban situadas justo encima de viviendas u oficinas. En el primer caso, se midió un gran aumento de la contaminación electromagnética en el dormitorio directamente debajo de las antenas 5G, en comparación con la situación anterior a la instalación del 5G cuando el equipo 3G/4G estaba en la misma ubicación.
En ambos casos, la radiación después de la instalación del 5G fue extremadamente alta directamente debajo de las antenas 5G, con algo más de 2.500.000 μW/m2 y 1.180.000 millones de μW/m2 respectivamente en el primer y segundo caso. El aumento extremo de la contaminación electromagnética provocó síntomas graves de electrosensibilidad en un par de días en el primer caso y síntomas claros de hipersensibilidad electromagnética poco después en el segundo caso.
En ambos casos, las cuatro personas estudiadas no tenían problemas de salud antes de la instalación de las antenas de telefonía 5G en el techo justo encima de ellos. Después de mudarse de las dos propiedades a hogares/oficinas con niveles de contaminación electromagnética significativamente menores y sin antenas 5G, todas las personas estudiadas experimentaron que los síntomas desaparecieron rápidamente o en un par de semanas.
