Testimonios
ALGUNOS TESTIMONIOS DE PERSONAS QUE YA HAN CONFIADO EN NOSOTROS: |
Hola! Alberto, te escribo unas breves palabras para comentarte que nos pareció la medición.
En primer lugar, nos pareció muy completa como bien decías, no sólo es importante medir la antena sino todo lo demás a lo que estamos expuestos en nuestra propia casa.
Por otro lado, nos transmitiste seguridad y confianza, pues, está claro que sabes de lo que hablas por tu formación y sobre todo como parte afectada.
Y como colofón a la medición los consejos saludables y posibles soluciones, por todo ello, tenemos claro que si tenemos que volver a medir, no dudes que te llamaremos.
INMENSAMENTE AGRADECIDA, ROSA.
Como dice un probervio indú: «Aquel saber que no se comparte, se acaba pudriendo».
ROSA DOMINGUEZ
Cobiza (TOLEDO)
Hola Alberto.
Te mando este testimonio para que lo uses como mejor pueda ayudar a otras personas.
Hace unas semanas estuviste en casa, en el centro de Madrid, haciendo mediciones.
Te llamé porque con «agosticidad» habían instalado un repetidor de telefonía móvil frente a mi piso, que se sumaba a los innumerables que ya tiene la sede de Telefónica en la Gran Vía y que nos afectan. Yo tenía muchos síntomas de electrosensibilidad desde que me mudé hace unos 7 años y entonces me resultaban ya insoportables y enormemente preocupante.
Se habían agrabado por haber tenido que hablar mucho por el teléfono móvil en días anteriores, sin auricular (ya está resuelto y ahora estoy buscando uno de bajas emisiones, como me recomendaste).
Entonces era capaz de notar las emisiones de antenas por la presión en la cabeza y oídos, por ejemplo, caminado por el centro dentro del radio de acción de Telefónica).
Retiré, por indicación tuya, el teléfono inalámbrico, que resultó ser el principal causante, y que se sumaba a las del router inalámbrico de internet. Lo sustituí por otro «ecológico» como me dijiste. Es indignante que sólo al final del manual de instrucciones, el fabricante indica cómo ha de usarse para recibir menos ondas, como si fuera algo accesorio, para no crear alarma social (entonces, ¿porqué están sustituyendo sin decir nada). Y pensar que los padres los ponen en las cunas de los bebés …. Tambien noto mucho cuando apago el router de internet (y viceversa).
Las emisiones de las antenas las amortiguaban el enorme grosor de los muros de mi casa, como me dijiste. A veces noto un dolor de oido y es que estoy en el campo de acción que atraviesa una ventana, como me advertiste.
Además de las emisiones de enchufes, lámparas, cables empotrados y microondas cancerígenos, que yo ya no usaba, descubriste que otra fuente importante era mi piano electrónico, cuyo campo se extiende a cada una de las teclas, que están frente a mis órganos vitales y encima de mis piernas. Este piano, sobre el que paso horas, me ha causado una tinitus por el campo magnético de los auriculares alrededor de mi cerebro, que el otorrino ha sido, por supuesto, incapar de relacionar. El nebulizador del humidificador funcionaba a base de un enorme campo electromagnético, que afortunadamente tengo bastante separado (al contrario que los enfermos o los
bebés, que los tienen en las mesillas de noche junto a la cabeza …). Tambien noto en los dedos el ratón táctil del ordenador portátil, como me informaste. Esos ordenadores que causan tantos cánceres de útero y estómago cuando la gente se los pone sobre el regazo en la cama.
Hoy estoy mucho mejor, como todo el mundo, con problemas que no los notamos por la costumbre. Cualquier efecto dramático sobre la salud, o menos dramático, como falta de vitalidad, bajada de defensas, mala cara, sueño ligero, etc (que ya los tengo), parecería difícil relacionarlo con ésto, si no es por la experiencia personal de algunos, y de ello se aprovecha la industria.
Otro amplísimo tema es el alimentario, sobre el que conversamos en tu visita y que merece capítulos aparte.
Recomiendo a todo el mundo que haga mediciones de este tipo en su casa, pues su salud y bienestar mejorarán fácilmente, con pocos cambios.
JOSÉ-FERNANDO CASAL
(MADRID)
Hola a todos,
Vivimos a mil por hora, oimos pero no escuchamos y hay cosas que por nuestro bien y el de nuestros niños debemos escuchar y con atención y sin miedos, Cuando descubrí todos los peligros que conlleba la radiacion, y no solo la producida por los humanos, sino tambien las provenientes del centro de la tierra, como son las corrientes telúricas tan perjudiciales para los niños (algunos cientificos ya hablan de que pueden causar muerte subita en lactantes) me apresuré a buscar la manera de protegerme a mi y a los mios de este gran mal, y para ello contacté con Alberto.
Despues de su visita a nuestra casa y al decirnos que nuestra casa estaba «limpia» vivimos MUCHO mas tranquilos y hemos quedado tan contentos que le hemos pedido que mida la radiación en casa de los abuelos e incluso en el colegio de nuestra niña.
Contaremos en todas nuestras futuras casas con sus maravillosos consejos sin dudarlo.
Un saludo a todos,
MACARENA ARRIOLA
(MADRID)
EL AUTOR DE ESTA PÁGINA WEB, ALBERTO CELA, PUEDE DAR FÉ Y APORTAR PRUEBAS SI FUESE NECESARIO, DE QUE:
1) TODOS Y CADA UNO DE LOS TESTIMONIOS QUE AQUÍ APARECEN PERTENECEN A PERSONAS A LAS QUE SE CONOCIÓ POR PRIMERA VEZ CON MOTIVO DE LA REALIZACIÓN DE UN ESTUDIO DE CONTAMINACIÓN ELECTROMAGNÉTICA EN SU VIVIENDA Y/O LUGAR DE TRABAJO Y, POR TANTO, NO PERTENECEN EN NINGÚN CASO A FAMILIARES, AMIGOS, O CONOCIDOS.
2) CADA OPINIÓN SE HA PUBLICADO TAL Y COMO SE NOS HIZO LLEGAR EN SU MOMENTO, ES DECIR, SIN NINGÚN TIPO DE MODIFICACIÓN POR NUESTRA PARTE.
3) TENEMOS CLIENTES EN TODAS LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS DE ESPAÑA, INCLUIDAS LAS ISLAS BALEARES E ISLAS CANARIAS, PERO SÓLO ALGUNOS DE ELLOS, LOS TESTIMONIOS AQUÍ EXPUESTOS, DECIDIERON DAR A CONOCER SU EXPERIENCIA.
Hola Alberto, solo queria agradecerte el que estes haciendo este servicio y el que aconsejes sobre como podemos hacer el ambiente en el que vivimos mas seguro para no tener que lamentarnos despues.
Los seres humanos parecemos ninos que usamos alta tecnologia sin entender mucho de los efectos que producen. Como dice Carl Sagan: Tenemos una sociedad tecnologica, gobernada por lideres que no entienden de tecnologia o ciencia.
Nadie parece ser un adulto con el uso de moviles, microondas, antenas de telefonia, etc.. como tampoco nadie parece serlo con el tabaco, las comidas grasas y los regimenes de vida que nos llevan a padecer enfermedades terminales antes de tiempo. Se sacan al mercado tecnologias sin probar sus efectos a largo plazo en seres humanos y para cuando esos estudios salen, la tecnologia esta implantada y es dificil prescindir de ella.
Gracias por ofrecer esa infromacion adulta con tus medidores de radiacion, para que podamos tener libertad de decision sobre como queremos vivir nuestras vidas, y hacer nuestros entornos mas limpios y acogedores para nosotros y para los demas. Oasis antiradiacion.
Un abrazo,
Miguel A. Fuertes
(MADRID)
Hola, Alberto. Soy Esther Hernandez, la chica que te pidió medir el piso de Parroco Julio Morate en Delicias. Te escribo para agradecerte el trabajo profesional que realizaste para medir las radiaciones.
Además me gustaría contribuir con mi testimonio para que la gente se conciencie poco a poco. He tardado pero ahora que dispongo de un rato bueno quería dejar mi testimonio para ayudar a otras personas.
Creo que antes de comprar un piso todos deberíamos percatarnos de lo que hay alrededor y no me refiero a parques, colegios y demás que también es importante. Me refiero a las antenas de telefonía, transformadores, picoantenas (en nuestro edificio y en las proximidades) que pueden estar perjudicándonos sin saberlo.
Donde viene a veces es en las escrituras del piso (lástima que no las tengamos hastra cerrar el trato, pero si podéis, pedid que os dejen echar un vistazo a las mismas antes de comprar el piso para evitar sorpresas como la que yo me llevé). En mi caso,había examinado previamente la zona y todo estaba correcto salvo una puerta metálica con rendijas de ventilación que me hizo sospechar que podía ser un transformador. Más tarde leí en unas viejas escrituras que la dueña del piso me dio, que existía un sótano para acometidas de transformación y distribución de energía eléctrica. Me puse de los nervios, me colé en los garajes y sótanos y no encontré nada. Aún así no me quedaba tranquila. Me daba rabia reconocer que incluso mirando y remirando la zona ( a los tejados buscando antenas, a los bajos buscando transformadores, picoantenas…)hubiera dado con un piso con transformador. Pero la realidad es que podía haber sido así. Desgraciadamente estamos rodeados de elementos que nos perjudican con los campos magnéticos que produceny no nos damos cuenta porque no los vemos. Y en esto de las radiaciones hay que creer para ver. Pero creer porque hay suficientes estudios científicos que así lo demuestran.
Siguiendo con mi relato, no encontré el sótano de transformación pero yo no me quedaba agusto sin saber si la casa que creía haber encontrado iba a ser perfecta para vivir, vivir con salud. Entonces no me lo pensé, llamé a Alberto (tenía guardado su teléfono como oro en paño de la feria de biocultura que recomiendo a todo el mundo y que se organiza todos los años en Madrid). Casi de un día para otro vino a medirme la casa. Midió Todo!!! Y menos mal. Al final concluyó que la casa donde iba a vivir era una casa sana. Tuve suerte porque podía haber sido que no. Y sólo lo pude saber y quedarme tranquila tras la medición de Alberto (que por cierto duró casi dos horas pues todo lo que aparecía nos lo explicaba o nos aconsejaba que hacer).Su trabajo básicamente se resume en lo siguiente:
- Medición de las radiaciones externas de la calle (antenas de telefonía, picoantenas…)
- Medición de las Las radiaciones de los aparatos domésticos (dects, frigoríficos)
- Medición de la conductividad de los suelos (el mejor el de gres de la cocina aunque me imagino que dependerá de la calidad del material)
- Medición de las posibles geopatías también causantes de campos magnéticos
- Medición de la radiactividad (por favor, ventilemos el cuarto de baño para eliminar posibles emanaciones de gas radón. Toda la casa!! Consejo tan fácil de llevar a cabo que me dio Alberto…)
- Medición de las radiaciones hasta el bajo, el portal y la calle para ver si había algún foco importante
- Medición de las radiaciones que emitía la supuesta puerta metálica (que al final no fueron muy elevadas y no afectaban a la vivienda)
- Midió también la conductividad que teníamos en el cuerpo y si estábamos muy cargadas o no. (consejo sencillo: estar descalza en el suelo de la cocina para descargarme o sesiones de biorresonancia)
- Nos dió consejos a la vendedora del piso y a mi para evitar o eliminar radiaciones que generamos en nuestro propio hogar: No poner nunca el cabecero de la cama al lado de enchufes o en la pared que de a aparatos eléctricos como el frigorífico que estén pegando en otra habitación, no poner el sofá en la pared donde justo haya una televisión en la otra habitación, eliminar los dects (pues la señora tenía dos y el aparato se volvía loco de tanta radiación que emitía el dect!! Era como tener dos antenas de telefonía en casa!!!
- Consejos para mitigar los efectos de las radiaciones como consumir alimentos ricos en omega 3 (Pescado azul, cápsulas naturales, nueces, plátanos) para fluidificar la sangre.
El trabajo que realizó Alberto fue muy meticuloso y profesional, utilizó aparatos muy sofisticados y específicos para cada tipo de medición (según el elemento causante de las radiaciones).
De veras estoy muy agradecida y ya puedo descansar tranquila en mi «casa sana» y si no, habría estado dispuesta a renunciar a ella y buscar otra. Espero que mis palabras sirvan a otras personas para concienciarlas de lo importante de medir las radiaciones antes de comprarse un piso. Insto de veras a los que lo hagan a medirlo antes de comprarlo para asegurarse de no estar rodeados de campos magnéticos sis saberlo y padecer los múltiples trastornos que conlleva vivir entre ellos años y años.
Gracias Alberto
Un saludo,
Esther Hernández
(MADRID)
No somos muy conscientes de todos los factores ambientales, geológicos, eléctricos, magnéticos, etc. que son susceptibles de afectar a nuestra salud, lo cierto es que estamos rodeados de energías positivas, sin duda, pero, también, de energía negativa.
Esta última pueda dañar nuestra salud, en concreto, nuestro sistema inmune, por lo que no solo la conciencia sobre esta cuestión, sino también la localización de dicha energía en nuestro entorno resulta esencial. En este sentido, es esencial observar si tales energías negativas están presentes, ya sea en nuestro hogar, ya sea en nuestro lugar de trabajo, y en qué medida, con el fin de intentar neutralizarlas.
En mi caso, por ejemplo, resulta que, desde que me cambié de casa, no podía conciliar el sueño bien, me levantaba de la cama más cansada de lo que me había acostado, mi marido se volvió irascible, con la tensión arterial y ocular altísimas y,luego, llegó un cáncer. No sé en qué medida, tales situaciones proceden de una afectación de las energías electromagnéticas, pero lo cierto es que decidimos medir nuestra casa.
Este trabajo lo realizó Alberto Cela, con suma precisión y detalle, con rigurosidad y profesionalidad, y, gracias a sus consejos e información, pudimos deshacer numerosos situaciones que nos estaban afectando directamente la salud, de hecho
mientras dormíamos, por ejemplo, estábamos recibiendo 120 voltios, cuando lo máximo admitido es, parece ser, de 10.
A todos aquellos que tengáis alguna duda sobre posibles campos electromagnéticas u ondas de Hartmann o de Curry en vuestro entorno o que, en determinados espacios no os encontréis bien, os recomiendo que penséís que, quizá, sean tales energías las causantes del problema. Alberto Cela, sin duda, con sus potentes aparatos y sus conocimientos, os puede resultar de gran ayuda.
Gracias Alberto por tu atención en todo momento, por tus mediciones, por tus actuaciones y por tus sugerencias.
Marta Tordesillas
La Navata (MADRID)
Ayer vino Alberto a casa como una brisa de aire limpio. Lo que más te convence es, en primer lugar, que Alberto habla desde la experiencia de un afectado por este problema, y en segundo, por sus aparatos de medición con los que te ayuda a hacer totalmente evidente lo que era invisible. Además, me parece que hace un chequeo completo para que no quede ninguna duda de nada. Es más, te enseña que a veces pueden ser las pequeñas instalaciones eléctricas nuestros peores enemigos en el efecto acumulativo del día a día.
En nuestro caso, después de habernos instalado en casa, empiezas a sospechar que hay algo raro pero que no sabes bien qué es.
Entonces empiezas a dormir mal por temporadas, y a buscar intuitivamente otros espacios donde ves que puedes dormir mejor. Le das vueltas a la cabeza, “¿qué pasa?, si yo antes dormía muy bien”, empiezas a investigar si es la alimentación, el estrés… Pero por fin, Alberto, nos confirma que tenemos una antena de telefonía que apunta a nuestra casa y lo que es mejor, te ofrece las soluciones para afrontar el problema y muchas de ellas muy sencillas.
Alberto, te agradecemos muchísimo todo el tiempo que nos has dedicado y admiramos la “guerra” en la que te has embarcado. Después de estar tanto tiempo dando vueltas a qué pasa por las noches, tu apoyo ha sido la gran clave para el progreso. Esperamos de corazón que puedas seguir ayudando a todas esas personas que no ven por lo invisible que acompaña a este problema, pero que ahora pueden contar con profesionales y aparatos de medición para entender.
Un fuerte abrazo.
Pedro Jiménez
(MADRID)
Hola Alberto,
Quiero agradecerte lo mucho que me has ayudado a resolver mis problemas con los campos electromagnéticos a través de la medición que realizaste en mi casa de Guadalajara en el mes de marzo y de tus consejos sobre cómo reforzar el sistema inmunetario para combatir la electrosensibilidad.
Tras tres años sin poder vivir en mi casa, debido a que cada vez que estaba allí me sentía fatal, por fin he podido recuperar mi espacio. El problema se debía fundamentalmente a un teléfono inalámbrico que el vecino de arriba tenía instalado. Por suerte, les propuese cambiarlo por uno ecológico -claro está, se lo regalé- y lo aceptaron.
También me ha ayudado mucho alimentarme con productos que combaten la electrosensibilidad y seguir los consejos de Alberto.
De nuevo, muchas gracias por mostrarme el camino. A todos los afectados por electrosensibilidad les aconsejo que lo sigan.
Vicenta Cobo
(GUADALAJARA)
No sabes lo que me alegro de que vinieses a casa a medir el nivel de radiación, me arrepiento de no haberlo hecho antes, cuando estaba embarazada, pero nunca es tarde. No me podía imaginar que un aparato como el «vigila bebés» pudiese emitir tanta radiación, me pone los pelos de punta que le haya estado apuntando a mi bebé con eso precisamente por su seguridad… ironías de la vida!.
Mis vecinos de abajo ya han cambiado el teléfono inalámbrico, menos mal que he dado con buena gente.
Muchas gracias Alberto por ayudarnos a que nuestra casa sea un lugar mas saludable, por nosotros y sobre todo por nuestro bebé.
Gema
Leganés (MADRID)
Hola Alberto, somos Pilar y Enrique de Catarroja, Valencia, en primer lugar darte las gracias por toda la información que nos diste. En este momento llevamos una semana durmiendo en casa de un familiar pues nos resulta insoportable estar en el piso, ya estamos buscando otro, pero nos encontramos con la ignorancia de mucha gente que nos dice que no sabian que estas cosas existen, la promotora no nos ha puesto problemas para irnos, a la vez que nos discute que la finca esta limpia y eso que le decimos no puede ser, pero claro entendemos que va contra sus intereses a la vez que el local del supermercado que hay debajo es de la promotora, y el piso lo volveran a alquilar, nos dicen que nos olvidemos de esto que en realidad debe ser que no nos gusta estar aqui o que no podemos pagarlo, todo menos la verdad.
Solo hace 5 semanas que vivimos aqui. Es increible, la gente esta deshumanizada, todo vale por el dinero. Tenemos todo el apoyo de nuestras familias y amigos que nos dicen que lo mejor de todo a sido llamarte.
Esto es como una pesadilla, pero seguro que con el tiempo encontraremos la respuesta de porque nos esta pasando, es nuestra filosofia, solo hay que estar atentos para seguir creciendo.
De momento es todo lo que podemos contarte, gracias, una y mil veces, por todo. Que la vida te cuide y te llene de energia para seguir luchando por una causa tan noble como es la salud de todos los que un dia confiamos en ti.
Un fuerte abrazo.
Pilar Carbó
Catarroja (VALENCIA)
Hola Alberto,
Hace unas semanas tuvimos el placer de tenerte en mi casa en San Martin de la Vega.
El motivo por el que nos animamos a pedirte tu opinión fue básicamente una sospecha que yo tenía respecto al soterramiento de una línea de alta tensión cerca de nuestra casa. Mis sospechas fueron confirmadas por ti y aunque fue una mala noticia siempre es mejor saber la verdad.
El informe que realiazaste sobre nuestra casa y todas las mediciones fueron completísimas. Sorprendentes fueron las mediciones que nos diste a conocer sobre el teléfono inalámbrico (es como si tienes una antena de telefonía móvil en tu casa) y el microondas ya que dichos aparatos suelen utilizarse mucho en todos los hogares.
Nos diste a conocer muchos consejos sobre como mejorar la biohabitabilidad de la misma: Evitar dormir cerca de los enchufes, Tener apagados los electrodomésticos, cambiar el teléfono inalámbrico por otro de baja emisión, como evitar las radiaciones en la habitación donde duermes, etc………………
De momento respecto a nuestra salud mi mujer y yo estamos fenomenal. Tú nos indicaste una serie de pautas a seguir respecto a otros temas como la alimentación, que bajo nuestro punto de vista son realmente importantes.
No quiero extenderme mucho y como colofón diré que lo recomiendo 100%. No solamente a aquellas personas que han perdido su salud. Tan importante como lo anterior es no perderla cuando se tiene y todos los consejos que nos dio Alberto van encaminados hacia ello.
Un saludo de Victoria y Javi
San Martin de la Vega (MADRID)
Estimado Alberto,
Quedé muy sorprendido con tu visita y con todo el tiempo que dedicaste a mi “preocupación”. Aún no he podido corregir todas las necesidades que me marcaste para conseguir que mi casa sea una casa saludable te garantizo que como mucho, en un mes y medio está todo listo. A nivel profesional me trasmitiste una implicación, seriedad y profesionalidad altísima.
A nivel personal me sorprendió mucho conocerte, eres una gran persona y eso no se ve todos los días. Afortunadamente tienes un pensamiento positivo y una paz interior que hace ver la luz que llevas dentro, eso es algo maravilloso. Consérvalo siempre Alberto y cuenta conmigo para cualquier cosa que puedas necesitar.
Te mando un fuerte abrazo y te mantendré informado de todo lo que vaya haciendo.
Carlos Córdoba
Pinto (MADRID)
Hola soy Paloma y este invierno estuviste en mi casa por Ventas para hacer unas mediciones. Quería darte las gracias porque desde que por fin he hecho todas las adaptaciones que me recomendaste ya puedo dormir y descansar bien.
La verdad es que merece la pena y no es nada complicado bajar los niveles de contaminación electromagnética salvo que vivamos junto a un transformador o subestación eléctrica.
Un saludo,
Paloma
(MADRID)
Hola Alberto,
Te llamamos el viernes para que vinieras a evaluar una vivienda antes de alquilarla, y queremos transmitirte todo el agradecimiento que sentimos por el trabajo realizado. Es una verdadera fortuna contar con personas que, como tú, os dedicáis a aportar tanta luz en ámbitos en los que desarrollamos nuestra vida cotidiana, y en los que hay que abrir mucho los ojos, pues existen hoy en día multitud de elementos a tener en cuenta que pueden afectar seriamente a la salud. Estamos viendo la enfermedad con tanta frecuencia…¡cuando lo natural es estar sano!
Tenemos antenas de telefonía móvil emitiendo a unos niveles que absolutamente desproporcionados, teléfonos inalámbricos en casa que son tan peligrosos o más que las antenas exteriores, la wifi, la red eléctrica, aparatos eléctricos, proximidad de transformadores o cableado de alta tensión…
Muchas veces me pregunto de qué pasta hay que estar hecho para estar detrás de decisiones cuyas consecuencias suponen tanto riesgo para la salud y para la vida. Quizás se sienten al margen de los efectos, quizás lleven tiempo confundiendo valor con precio, navegantes con rumbo equivocado…
Por eso es tan importante la labor que desarrollas. Desde luego, contaremos contigo cada vez que nos movamos.
Muchas gracias y un fuerte abrazo,
Charo
Leganés (MADRID)
Alberto: mi madre y yo queremos darte las gracias por el trabajo realizado en nuestra casa, pués el resultado ha sido muy bueno.
Gracias a Dios y las mediciones que has hecho en nuestra casa y a los consejos que nos has dado para protegernos de las ondas electromagneticas, mi padre que tiene alzheimer y estaba bastante nervioso y a veces agresivo ahora está mas tranquilo y duerme mejor; yo que me acostaba y dormia muy inquieta con muchas taquicardias y arritmias tambien se me han quitado y duermo mucho mejor.
Mi padre al dia siguiente de estar tu aquí, se levantó diciendo, que tu eras un santo, él ya no sabe expresarse bien pero, a su manera él estaba muy contento, porque esa noche durmió 15 horas,
se levantaba para ir al servicio y seguia durmiendo, porque anteriormente casi siempre que se levantaba se quedaba deambulando por la casa. Bueno, te lo escribo tambien por si quieres ponerlo como testimonio en tu pagina web.
Muchas gracias de M.Victoria y Maria José, que Dios te bendiga y aquí tienes unas amigas para siempre.
M.Victoria y Maria José
(MALAGA)
Buenos días Alberto,
Quería darte las gracias por el gran trabajo que realizaste en mi casa. Estaba preocupada por la constante caída de mis defensas sin que hubiese ninguna causa aparente para ello, y consideraba que el vivir en una casa lo más sana posible podría ayudarme a mejorar.
El examen que realizaste fue totalmente exhaustivo. Además las explicaciones que dabas eran muy claras y las soluciones a los problemas detectados sencillas. El hecho de que tú mismo seas un afectado por la electrosensibilidad da mucha confianza. Me quedé impresionada con la contaminación que emiten los inhalámbricos de mis vecinos, nunca hubiese pensado que tener un inhalámbrico cerca puede ser más dañino que una antena de telefonía móvil.
También quería agradecerte, que con posterioridad hayas resuelto mis dudas sobre los repartidores de costes de calefacción que quieren instalar en mi comunidad de vecinos.
Un saludo y gracias de nuevo por tu excelente trabajo.
Elena
(MADRID)
Buenos días Alberto,
Yo no soy electrosensible, al menos en el sentido que muchos referís en vuestros comentarios, pero desde hace años padezco de migrañas, que se fueron incrementando con el tiempo, y desde hace una década tenía continuamente dolores y contracturas musculares, así como sueños tensos (en los que apretaba los dientes) y una sensación de fatiga que me limitaba para hacer muchas cosas. Lo atribuía al estrés del trabajo (soy médico de familia en una consulta de un centro de salud, en Gijón), pero me sorprendía que mejoraba siempre cuando pasaba unos días fuera de casa. Lo peor vino después: Hace tres años me detecté a mí misma en una analítica una Leucemia linfática crónica.
Aunque se trata del tipo más leve de leucemia, y estoy en un estadio 0 que ni siquiera requiere por ahora tratamiento, me encontraba sumamente cansada, llena de dolores, y con infecciones de repetición. Así que me planteé seriamente un cambio de vida. Dejé el trabajo (como no me jubilaron pedí una excedencia), cambié mi alimentación, hice un trabajo profundo con mis emociones, empecé a meditar diariamente, y a hacer más ejercicio físico. Comencé también un tratamiento de fitoterapia y un tratamiento de bioenergetica, con los que sigo.
Fui mejorando poco a poco, pero seguía con muchos dolores de cabeza y con sensación cansancio enorme cada vez que realizaba cualquier esfuerzo relativamente pequeño, como invitar a comer a mis hijos. En noviembre del año pasado (2016) descubrí que enfrente de mi casa hay un hotel con dos antenas de telefonía móvil camufladas como chimeneas. Me puse paranoica y decidí cambiar de casa, pero tras un mes de dedicación exclusiva a mirar viviendas con un mapa de las antenas de Gijón en la mano, no encontré ninguna a suficiente distancia de alguna antena, ni tampoco podía asegurar que no tuviesen otros campos de alta o baja frecuencia. Desesperada, que llamé al teléfono de Alberto Cela y concreté con él una visita a mi casa en Gijón. Alberto llegó con un maletín cargado de maravillosos aparatos y de toda su experiencia vital, y estuvo haciendo mediciones durante todo el día. Lo primero que detectó es que apenas llegaba radiación de la antena a nuestra casa, lo que fue un enorme alivio, y evitó tener que vender lo que sentía como mi hogar, pero encontró otras alteraciones electromagnéticas tanto o más graves, y me aconsejó bastantes cosas que creo que han sido muy útiles. Os hago un resumen:
1.- Apagar el router wifi y trabajar con conexión a internet a través de cable. Este era el punto negro de la casa, lo peor, mucho más que la antena de telefonía móvil. Nos quedamos impresionados al ver en el aparato medidor de Alberto las cifras tan altas de radiación y escuchar el pitido de sus aparatos en cuanto encendíamos el router. Así que ahora encendemos sólo el router en casos de necesidad, de manera muy puntual (y preferentemente estando yo fuera de casa), y cuando necesitamos manejar muchos datos de internet lo hacemos a través del ordenador fijo, por cable.
2.- Pintar la pared de nuestro dormitorio con pintura anti-radiación y forrar los cristales de la ventana con vinilo anti-radiación. Aunque la radiación de la antena de telefonía móvil era pequeña, Alberto nos aconsejó tratar de bajarla incluso a cero en el dormitorio, más aún teniendo yo una leucemia. Esta pintura también nos protege del cableado de la pared y de la radiación de la casa vecina. También lo hicimos, comprando los productos por internet con la información que Alberto nos dio.
3.- Quitar los teléfonos inhalámbricos (nuestros y de los vecinos) y sustituirlos por teléfonos con opción «Eco». Lo hicimos.
4.- Desenchufar la radio-CD cuando no la estemos utilizando. No os podéis imaginar el campo que emite, aunque esté apagada. Yo tenía varias en distintas habitaciones de la casa, todas enchufadas siempre. Pues no. Hay que desenchufar. Ahora la desenchufo siempre cuando la apago.
5.- Quitar todas las bombillas halógenas de bajo consumo, las antiguas, esas con el centro en forma de tubito en espiral. Tenía un montón, y las hemos sustituido por led. Esas bombillas antiguas de bajo consumo generan smog eléctrico, o electricidad sucia, que también provoca un campo nocivo para la salud. Pero como la electricidad sucia no sólo depende de nosotros sino de los vecinos, porque la electricidad es un fluido continuo, Alberto nos aconsejó instalar un filtro especial para disminuirla, que se pone en los enchufes. Para el tamaño de nuestra casa nos aconsejó comprar dos, que adquirimos por internet, y colocamos estratégicamente en dos enchufes.
Además de todo esto, y de comprobar que no teníamos radiación, ni formaldehído, ni electricidad estática, ni geopatías en los puntos de descanso, Alberto nos explicó todo lo que él hace para mejorar su sistema inmune: tratar la disbacteriosis intestinal de modos continuo, realizar una dieta especial, y tomar suplementos de ácidos grasos esenciales y algún superalimento como el hongo reishi. Esta parte no la he aplicado, porque tomo mis propios suplementos y hago mi propia dieta, (que aunque coincide en gran parte con lo que el hace, no es exactamente igual).
En la fecha que Alberto vino a hacer las mediciones de mi casa iba yo a realizar también un tratamiento en mi dentista, consistente en retirar todas las amalgamas de mercurio, con un protocolo especial. Se lo comenté y él me aconsejó fervientemente que lo realizara, y me dio las pautas de tratamiento con Clorella para eliminar el mercurio del organismo los meses sucesivos.
Qué ha ocurrido después de aplicar estas medidas?
Pues os diré que las migrañas prácticamente desaparecieron desde la primera semana, y el estado general y energético también ha mejorado. Mi sistema inmune está bien, porque no he pasado ni siquiera una gripe, y el único catarro que he tenido en todo el invierno ha durado tres días (aunque esto ya me ocurría antes de que viniera Alberto, y se debe a los otros tratamientos que realizo). No sé cómo estará la leucemia, porque hasta julio no me toca hacer análisis, pero os lo diré cuando tenga los resultados.
Os puedo afirmar, sin ninguna duda, que aunque no tengamos síntomas de electrosensibilidad, los campos electromagnéticos pueden afectarnos de muy distintas maneras.
La mala noticia es que esos campos están por todas partes, y no podemos evitarlos. Pero la buena noticia es que hoy en día existen muchas medidas correctoras que se pueden llevar a cabo, y que podemos realizar cambios en nuestras vidas para mejorar nuestra tolerancia a los mismos. De hecho, yo he mejorado al llevar a cabo las medidas correctoras que se me aconsejó. Gracias, Alberto!
Así que ánimo y adelante a todos!
María Martínez
Gijón (ASTURIAS)
Muy buenas:
Os escribo, porque después de haber estado Alberto en mi casa hace 2 meses he notado una mejora notable. Todavia tengo que cambiar alguna cosa que me aconsejo, pero los puntos que mas me afectaban están controlados. No hay nada como saber QUE es lo que mas radiación te produce en casa y COMO solucionarlo (en algunos casos hay hasta varias opciones).
Un saludo a todos lo electrosensibles y a Alberto muchas gracias por todo.
Oscar
Barakaldo (PAÍS VASCO)
Hola, somos Jesús y Yolanda de Barcelona, y escribimos estas palabras para agradecerle a Alberto su ayuda, profesionalidad y humanidad. Le pedimos asesoramiento profesional en un momento de mucha necesidad y él, sin dudarlo, se trasladó a Barcelona rápidamente para dar solución a unos problemas, que ningún otro profesional nos había dado.
Además de solucionarnos el tema electromagnético y de realizar un informe de biohabitabilidad, compartió con nosotros su experiencia e investigaciones sobre el tipo de alimentación y los suplementos más adecuados en situaciones de electrosensibilidad, recomendaciones que estamos poniendo en práctica y que están contribuyendo a nuestra calidad de vida.
Seguramente hay otros muy buenos profesionales especializados en el estudio de los campos electromagnéticos, pero Alberto tiene un «plus», y es que él mismo ha experimentado lo que significa ser «electrosensible» y cómo vivir con ello.
Por todo, le estamos muy agradecidos y le deseamos que pueda seguir ayudando a muchas más personas.
Jesús y Yolanda
(BARCELONA)
En julio de 2019 le pedí a Alberto Cela que viniera a mi piso porque hacía tiempo que tenía dolores de cabeza y dificultad para dormir; en general no me encontraba a gusto en casa. Dos años atrás ya me habían pintado las habitaciones con la pintura apantallante y había puesto cortinas también apantallantes.
Alberto hizo mediciones no solo de ondas de alta y baja frecuencia, que ya habían medido otros, sino de las ondas magnéticas de toda la casa y de los aparatos eléctricos, y también comprobó la electricidad sucia, el nivel de residuos del agua, la radiactividad…, es decir, parámetros que otros no habían tenido en cuenta. Además me dio consejos sobre alimentación para mejorar mi estado de salud y mis defensas y me dijo webs de confianza donde podía comprar aparatos para medir las ondas.
Instalé el aparato para filtrar la electricidad sucia y noté una gran mejoría y he seguido en parte sus orientaciones de alimentación que me han ido muy bien. Ahora sé de qué aparatos eléctricos me he de alejar, qué bombillas he de utilizar y tengo los aparatos de medición que serán de gran ayuda si me cambio de piso (como me recomendó) para poder hacer un estudio del nuevo antes de comprarlo.
Con posterioridad me he comunicado con él para pedirle consejo o que me resolviera alguna duda y siempre me ha contestado. Para mí es una persona de confianza con la que puedo contar.
C.A.
(BARCELONA)
Alberto, mi nombre es Álvaro, soy estudiante de Empresa y Tecnología en la Carlos III de Madrid!.
Usted y yo nos conocimos hace varios años porque vino a medir campos a mi casa, debido a que yo me encontraba en tratamiento oncológico por un linfoma y era mas sensible a este tipo de campos.
¡A día de hoy estoy completamente sano!.
En nombre de todos, gracias.
Con cariño,
Álvaro
(TOLEDO)
Alberto vino a mi casa tras una llamada mia, por que yo había estado despertándome sin ningún motivo aparente y asfixiada de calor en pleno invierno sin conocer el motivo por el que esto sucedía, pues no estaba enferma.
Alberto detectó corrientes de agua en el subsuelo de mi dormitorio y una antena. Me aconsejo un apantallamiento con grafito, y dormir en otra dependencia. Efectivamente, mi insomnio desapareció. En evitación de ulteriores patologías, me salvo a tiempo, ya que un insomnio prolongado desbarata cualquier organismo
Gracias de verdad, estimado Alberto.
Sonsoles
(SALAMANCA)